martes, 10 de julio de 2018

Fantasia y realidad, preñando a la hembra

Llevo mucho, mucho tiempo sin escribir en este blog y me gustaria reabrirlo, con un comentario que trata de un tema que quiza es la expresion máxima que puede darse en una realción cuckold y es el dejar embarazada a la hembra.

He tenido hace unos meses esa experiencia, y creedme es increíble, es la expresión máxima de dominio, dejar embarazada a la hembra para que el cornudo se encargue de tu hijo.

Pero no es sencillo, yo he tenido una gran cantidad de prejuicios antes de acceder a dejar embarazada a la hembra, principios eticos y morales son los que me impedian hacerlo, es mas; a dia de hoy no puedo dejar de considerar que cuando nazca será mi hijo, quiza a quien no tiene hijos eso no le diga mucho pero a aquellos que los tenemos si que importa.

Quiza no sea este el lugar indicado para hablar de ellos pero lo cierto es que creo que es improtante ver las cosas desde distintas opticas para poder decidir cuando se presenta la ocasion, basicamente porque muchas veces el cerebro inferior puede con el superior y luego nos lamentamos.

A mi inicialmente se me plantearosn dos temas;
El primero era con quien estaba y como de preparados estaban para acoger a un hijo y criarlo, no nos equivoquemos, por este mundo pasa mucho loco y yo tenia claro que no iba a participar en traer nadie al mundo si tenia la mas minima duda de que ese nuevo ser seria cuidado como se debe, por suerte esta pareja deseaba esa descendencia y el cornudo no podia tener hijos, bueno: era muy dificil que los tuviera asi que accedi.

El segundo, que pasaria por mi cabeza una vez la criatura hubiera nacido, lo viera y de alguna forma pasaron por mi mente esos momentos vividos con mis hijos, los que yo crio, este punto no lo tengo claro, pero claro eso es futuro.

Sea como fuere y pase lo que pase lo primero que hicimos fue preparar el momento, ella dejo de tomar píldoras, y esperamos un par de meses para intentarlo, no dejamos de follar pero sin tener en cuenta si estaba ovulando o no, simplemente dejamos un par de meses para que los efectos de las píldoras se difuminaran un poco y se eliminaran, ademas coincidió la ovulacion con un fin de semana así que nos venia genial.
El cornudo cogió una de esas "villas" cerca de Madrid, casitas con todos los servicios que se os ocurran, jacuzzi, etc. así que nos metimos allí todo el fin de semana y claro, nos pusimos al lío, el cornudo nos hacia la comida, nos servia tal y como hacia habitualmente, quizá incluso mejor por el motivo de aquel encuentro. Ella llevaba de continuo una bala vibradora introducida para mantener el coño húmedo y receptivo en cualquier momento, nada que no hiciera ya pero claro todo el fin de semana salvo algún descanso cuando dormíamos. En realidad no hubo sexo especialmente duro ni nada parecido dentro de un orden claro, pero es que el morbo lo daba el hecho de estar follando para tener un crío, ese fue el punto especial y fue muy especial.