jueves, 8 de mayo de 2014

Mi zorra obedece....

Pues como comento en mi anterior post, hoy he realizado esa primera prueba de obediencia con María; hoy tenía que ir al centro para hacer una serie de temas laborales y a primera hora de la mañana (a las 6:30 horas) le he mandado un whatsapp, diciéndole que se preparara porque seguramente hoy la llamaría para quedar en un lugar que ya le diría a la hora que le dijera, debía ir con un traje de chaqueta con minifalda y tacones,  con liguero, medias y sin bragas, además le dije que se llevara un juguetito para cuando la avisara introducírselo en el ano de forma que luego no hubiera necesidad de dilatarlo. Bueno, fueron varios whatsapp’s, claro. Por supuesto, de esto no tenía que decir absolutamente nada a su marido.
El caso es que a las 11 horas aproximadamente la he llamado por teléfono y le he dado las instrucciones precisas para quedar a las 11:30, pidiéndola que se introdujera el vibrador anal para que fuera dilatando, aunque realmente no lo necesitaba, pero  por jugar...
Y a las 11:30 estaba justo donde la había indicado, yo la vi desde cierta distancia, parecía nerviosa, mirando a un lado y a otro, esperando que apareciera. La había citado justo al lado de la escalera de bajada al parking… Yo estaba en una cafetería justo enfrente…
La llame por teléfono y la dije que perfecto, que lo había hecho muy bien hasta ahora y que bajara por la escalera y se dirigiera al piso -2, girará a la derecha y en el fondo vería que había unos baños, que se dirigiera hacia allí y entrara en el de caballeros y cerrara la puerta por dentro, yo llegaría y le haría un toque especial y acordado en la puerta para que me abriera, no sin antes decirle lo maravillosamente atractiva que estaba con su traje de chaqueta azul y esa blusa blanca… La verdad es que estaba fantástica, tiene unas caderas fantásticas y unas piernas algo gorditas, pero perfectamente torneadas, así que a mí personalmente se me puso tiesa nada más verla…., sabiendo lo que vendría luego, claro. Porque yo sabía que debajo de aquella minifalda justo por encima de las rodillas había un coño húmedo depilado, y unas medias con liguero. En fin, estaba impresionante, la verdad.
Cuando ella desapareció por la escalera seguíamos hablando por el móvil, con suerte llego al baño sin que se cortara la comunicación así que una vez llego y me lo confirmo, yo apure mi café, pague, todo muy despacio y me dirigí a la escalera  para encontrarme con ella en el baño, todo muy despacio y muy tranquilo, quería que ella saboreara la espera y yo también de paso….
Así que llegue por fin al baño e hice el toque acordado…, ella abrió la puerta y allí la encontré, se la notaba nerviosa y a la vez tenía una mirada ardiente de excitación… Nada más verla me apeteció darle un beso pero me contuve… Lo primero fue comprobar si había seguido mis instrucciones o no, así que la dije que se diera la vuelta y se pusiera de espaldas a mi…., le subí la falda hasta donde pude, ya que aunque no era un traje demasiado ajustado, era difícil levantarle la falda hasta la cintura…, así que la subí lo que pude y comprobé que efectivamente llevaba medias y liguero como la había pedido, metí un poco más la mano y descubrí que tampoco llevaba bragas y que tenía introducido el vibrador anal, que por cierto, encendí… Estaba tremendamente mojada….
Le dije que se diera la vuelta y le di un beso en la boca introduciendo mi lengua en su boca largo,  húmedo y profundo que me encendió aún más.  Le dije que así me gustaba, que cumpliera mis deseos…,  Le pedí que se quitara la falda y la chaqueta y el sujetador dejando la blusa desabrochada; tras lo cual la agarre y la puse mirando contra la pared la apoye las manos y la entreabrí las piernas, me aleje un poco y con mi teléfono le saque un foto de esta guisa, por suerte el baño era lo suficientemente amplio como para sacarle una foto casi de cuerpo entero… que envié a su marido inmediatamente por whatsapp.
Me desabroche y saque mi polla dura y se la metí en su sexo sin avisarla, quería sentir esa humedad, como su coño húmedo rodeaba mi polla…, y así estuve unos segundos, sin apenas moverme, hasta que la saque y la ordene que se sentara en el inodoro, donde directamente le metí la polla en la boca, primero un poco y fui introduciéndola más y más hasta llegar a su límite momento en el que saque una nueva foto que también envié a su marido inmediatamente…. Ella estaba excitadísima, en parte por lo que yo estaba haciendo y en parte por el vibrador que tenia encendido en el ano…
Después de unos minutos haciéndome la mamada me corrí en su boca y ella se lo trago todo… Como yo seguía empalmado y aquello no bajaba, la volví a poner contra la pared y la estuve follando un buen rato hasta que volví a correrme dentro de su coño. Obviamente en estos minutos saque varias fotos que también envié a su marido.
Después la ordene que se vistiera y se fuera, diciéndole lo mucho que me había gustado y lo zorra que era.

Yo hice lo propio, y me fui pensando que esto tendría que repetirlo, pero la próxima vez conmigo y con alguien más algún amigo….

lunes, 5 de mayo de 2014

Primera prueba, mi zorra me obedecerá?

Este fin de semana largo, por casualidad encontré un lugar estupendo para hacer una primera prueba de obediencia real, sin el cornudo, mi idea es la siguiente:
Como digo, este fin de semana en una visita al centro de la ciudad, descubrí que dentro de un parking había un servicio lo suficientemente amplio y sin medidas de seguridad, esto es cámaras interiores ni similares, perfecto para realizar una pequeña prueba con María (nombre con que acabo de bautizar a la mujer con la que conseguí procurar mi primera cornada a Manuel, nombre también ficticio).
Dado que yo habitualmente voy por aquella zona por motivos de trabajo y que ella trabaja también cerca, tengo pensado citarla a una hora en la que a mí me convenga, follarla allí mismo, y sacar varias fotos que enviaré a su marido, especialmente una en la que me este haciendo una buena mamada y que el enviaré mientras me la este follando, y alguna otra foto para enviársela después al menos una donde se vea mi polla introducida en su sexo y otra con mi corrida chorreando por su coño.


Ya os contaré…

miércoles, 30 de abril de 2014

Expectativas del cornudo, la zorra y el corneador

A lo largo de todo este tiempo que llevo en búsqueda he visto de todo, obviamente, alguna cosa ya la he ido escribiendo a lo largo de mis posts, pero hay una que creo que merece un análisis especifico por lo que me ha sorprendido, y son las expectativas, y me refiero a las expectativas del cornudo y las de su mujer, esto es especialmente notable en parejas que se inician o no tienen experiencia  en este tipo de relación, más o menos como yo…., en aquellas que ya la tienen, lógicamente la cosa es distinta, aunque los pasos que se siguen son los mismos.
Como comente en su momento, mi idea era y es,  antes de iniciar la relación "formal" de cornudo-zorra-corneador, quedar con la mujer a solas para tomar algo y hablar con ella sin interferencias,  sobre todo porque inicialmente tuve algunos contactos que no llegaron a ningún lado, donde básicamente era él el que la obligaba, y digo la obligaba, a mantener una relación de este estilo que a ella no le interesaba en absoluto; seguramente estos "él" lograrán sus propósitos y encontraran algún hombre sin escrúpulos que se prestará al juego y llevarán la relación al plano real para desgracia de ella. Realmente es muy triste contemplar algo así, no es más que un reflejo del machismo de determinados hombres…, y al final, la relación no es ni mucho menos, de cornudo-zorra-corneador, se le asemeja, pero no lo es, porque básicamente el cornudo no es tal desde el momento en que obliga a su mujer, la mujer es la zorra porque la obligan, no por convencimiento propio, y el corneador…, bueno, no lo sé, no sabría definir este ultimo rol.
Dicho todo esto, iré al grano…
Como digo hay una gran diferencia en las expectativas iniciales del cornudo y de su esposa, y un aparente "desconexión" de lo que él quiere y de lo que ella quiere, pero para explicarlo mejor, veamos como comienza todo y cómo evoluciona.

Capitulo 1, el contacto.
Normalmente yo recibo una respuesta a alguno de mis anuncios; esta respuesta siempre es del cornudo, nunca, repito, NUNCA, he recibido directamente una respuesta de la mujer, y llevo unas cuantas respuestas ya… Este es el primer dato que me ha parecido curioso, quizá tenga todo el sentido del mundo, pero a mí me ha sorprendido que la "selección" del corneador la haga el cornudo sin la participación de la zorra, que al fin y al cabo, va a ser quien "sufra" tanto al cornudo como al corneador.

Capitulo 2, la "negociación".
Luego se continúa con un intercambio de correos y/o conversaciones telefónicas,  pero siempre con el cornudo, nunca con la esposa, es decir, toda la comunicación que le llega a ella se hace a través de él y él echa la imaginación a volar y a hablar con el corneador todo lo que quiere para su esposa y todo lo que ella admite y desea, es decir, para empezar ella siempre es muy sumisa y lo admite todo, ella quiere sexo con el corneador y sus amigos, ella quiere que un día el corneador la ofrezca a 10 tíos que se la follaran entre todos, ella quiere que el corneador cobre por ofrecerla a otros hombres, ella quiere todo, absolutamente todo lo que uno se pueda imaginar, y claro, el corneador que tiene en mente todo eso, pues está deacuerdo en casi todo, de hecho es este el que suele hablar de todas estas fantasías y el cornudo decir que sí, que no habrá problema, alguno puede decir que vale, pero que hay que ir despacio, poco a poco … De hecho lo normal es que te trasmitan que de todas esas fantasías no se diga nada para ella no se asuste y además para que sea una sorpresa.

Capitulo 3, aparece ella.
En algún momento, después de que el cornudo haya "validado" al corneador y a todas sus fantasías aparece ella, ya sea por correo o por teléfono, por fin uno se cerciona de que ella existe y es real y de que el cornudo no era un pajillero. Y aquí comienza el principio del fin.
Uno, siguiendo las instrucciones del cornudo, habla con ella sin contarle demasiado de todo lo que ha hablado con el cornudo, recordemos que este lo ha querido así por un lado, y que el corneador, es decir, yo, quiero comprobar que ella efectivamente está en la onda de su marido, así que uno va con tiento. Y si, la mayor parte de las veces está en la onda, pero ni mucho menos ha imaginado lo que su marido quiere y desde luego y a priori, la mayor parte de las fantasías no las aceptan pero ni de lejos, otra cosa es que con el tiempo pudieran llegar a aceptarlas.
Lo cierto es que no sé exactamente que buscan ellas, quizá esa psicología femenina por un lado, y esos condicionantes sociales por otro, el caso es que no sé muy bien a que atenerme.  Da la sensación de que ellas actúan únicamente para complacer a su marido y en ningún caso porque ellas sientan esa necesidad de jugar a este juego o lo deseen.
Es como si te dijeran: "Mira, yo esto lo hago por mi marido, así que no te salgas del tiesto y todo irá bien".
Y claro, uno se lleva la correspondiente desilusión, porque no es eso lo que busca, no busca a alguien que no quiera jugar, y esa es la sensación. Pero por otro lado y por lo poco que se de la psicología femenina, es muy posible que ellas escondan sus cartas, y que simplemente quieran aparecer como "dulces mujeres amantes de sus esposos que transigen con sus vicios más oscuros".
Es decir, yo puedo asumir que las expectativas de ella sean distintas a las de él, que ella necesite sus tiempos para ir quemando etapas, pero me desarma que ellas no parezcan tener el más mínimo interés.

Capitulo  4, cada uno por su lado.
Y el resultado de todo esto es que, obviamente, la cosa no sigue y no se materializa nada, por un lado yo me desanimo y eso obviamente se nota por mucha seguridad que uno intente transmitir, y por otro él piensa a lo grande y se imagina a su mujer con 10 tíos alrededor en la segunda cita y para acabar ella, que no lo tiene muy claro (o quizá demasiado claro), aprovecha para desactivar cualquier posibilidad.



En definitiva, estoy seguro que no todas las parejas funciona así, pero aquellas que se inician si parece que las cosas no las tienen muy habladas, o quizá el problema soy yo, que también puedes ser.