jueves, 2 de diciembre de 2021

Otra vez en el mercado

Hola de nuevo, hace muchísimo, que no escribía nada aquí, por diversos motivos personales he estado ausente durante mucho tiempo, pero por fin de vuelta al ruedo.

Y en esencia buscando lo mismo de siempre, debo ser un animal de costumbres.

Pasado todo este tiempo, después de unas cuanta peripecias, recordar mis últimos post, especialmente el relativo al embarazo de la que entonces era mi pareja.

Decir que actualmente estoy separado desde hace algo mas de un año, así que tengo mucha mas libertad que antes aunque no toda la que me gustaría claro, no dejo de tener hijos y obligaciones, pero cosas que antes estaban vedadas o había que planificarlas con sumo cuidado y con tiempo, hoy en día son pasado.

He pensado bastante mi vuelta al "mercado", me he llegado a plantear incluso la posibilidad de convivir con una pareja de cornudo y sumisa, y lo he hablado con alguna pareja interesada, no lo descarto aunque de momento creo que no llegara a tanto aunque tampoco lo descarto en un futuro, si se que lo que deseos es una pareja con la que tener una relación de exclusividad, y con la que pueda vivir momentos y situaciones que hasta hoy me era muy difícil experimentar o vivir.

Es muy posible que en  mis comentarios a partir de hoy me repita y vuelva a temas ya tratados o comentados en el pasado, nos servirá de refresco para los que estuvisteis hace años y para los que entréis aquí por primera vez para conocerme.


Poco a poco iré introduciendo mas contenido, espero poder, poco a poco ir posteando un par de ves al mes como mínimo, aunque todo dependerá de vosotros, de los que leéis esto y de aquellos que sin leer este blog interactúan conmigo.


martes, 25 de septiembre de 2018

Confusiones


Últimamente estoy especialmente activo..., no hace demasiado me he llevado una pequeña decepción y tengo unas cuantas cosas que decir, no porque yo detente la verdad absoluta, claro, pero sí creo necesario aportar mi visión de este tipo de relación, que no es la única, pero si es la mía.
Bien, al lio..., en esta ocasión me gustaría hablar del compromiso en la relación y de un pequeño desequilibrio que veo en muchas parejas.
He notado que los requisitos de muchas parejas de cornudo y esposa, especialmente del cornudo, imagino que de acuerdo con su esposa, obligan al corneador a tener una especie de estilo de vida obligatorio para poder acceder a ser el corneador, me parece licito que una pareja tenga unos criterios igual que yo tengo los míos, ahora bien, deben ser criterios a mi entender justos y equilibrados y dirigidos a la relación en cuestión no a la vida obra y milagros del corneador.
No hace mucho tiempo me encontré con una pareja donde buscaban un single sin obligaciones familiares, guapo, bien dotado, que estuviera disponible cuando lo precisara la esposa, más que un corneador pareciera que buscaran un sumiso con la polla grande.
Pues bien, yo entiendo que un cornudo ofrece a su mujer y que cuando su mujer se abra de piernas va a tener cientos de hombres haciendo cola con la polla como un mástil para follársela, lo que dudo es que en esa fila haya demasiados corneadores si es que hay alguno. Un corneador no es un hombre del  montón, un corneador  aporta lo que cualquier hombre no puede aportar a una relación de este tipo, aporta  lo que el cornudo no pudo aportar y por eso tiene que buscar un corneador.
Así que cuando leo la lista de requisitos lo normal es que me ría y les diga educadamente que yo no soy lo que buscan, que mejor miren en otro lado, yo voy para tomar posesión de la esposa, no para que ellos tomen posesión de mí, soy un corneador, no un desesperado dispuesto a cualquier cosa para follar.
Se les olvida o quizá nunca lo pensaron que esto es una relación equilibrada, y que no se puede pedir todo a alguien cuando se deja claro desde el principio que el es un tercero prescindible porque hay muchas pollas dispuestas a taladrar a la mujer.
No, no es así, si de verdad quieres es un corneador de verdad te lo tendrás que currar porque no todo el mundo vale,  un corneador no es un tipo con la polla grande y ganas de follar sino un tipo que lo que desea es cornearte y hacerte sentir un cero a la izquierda cuando el esta presente. Esto no es solo una relación física, es emocional, y la parte física es el medio pero no el fin; es le medio porque follarse a tu mujer es de lo mas intimo que te puede arrebatar,  el sexo es la máxima expresión de la intimidad de una pareja y arrebatártelo es de las cosas que mas emociones y mas fuertes puede producirte, cualquiera puede meterle la polla a tu mujer y follarsela pero pocos pueden hacer eso y desplazarte sexualmente, hacerse con al sexualidad de tu mujer y hacerte sentir un hombre inferior sexualmente, el macho beta en dos palabras.
Eso es lo que debes tener en cuenta, y si ademas tiene un pollon pues claro, ese es el perfecto...., pero no todos tienen ese pollon ni la tableta de chocolate.
¡Repito esto es emocional no físico...

lunes, 24 de septiembre de 2018

Cornudos dominantes

Últimamente me llama la atención como las parejas que buscan corneador intentan dirigir que es lo que se hace y como se hace llamándose a sí mismos sumisos; vayamos por partes,  no sorprende que una pareja que busca un amante a secas tenga claro que es lo que quiere y como, lo que si sorprende es cuando una pareja en la que se definen como sumisos sexuales te dicen que hacer, como hacerlo y cuando, en definitiva el sumiso parece le corneador y no el corneado.
Vayamos por partes; cuando alguien busca (aquí no hare diferencias entre parejas, mujeres u hombres) un amo o se declara sumiso, lo primero de todo, lo que realmente le debería llenar o buscar, es el placer del amo sea cual sea este, y ese placer es el que debería de ser el motivo de placer para él/ella.
Que busca un corneador dominante; pues es fácil un corneador dominante es una especie “especial” de dominante que encuentra su placer en la dominación del cornudo y de la mujer de este, para ello lo principal es que el es quien dirige y quien decide que se hace, cómo y cuando se hace, y eso es incompatible con un cornudo (y digo cornudo porque su esposa no aparece para nada en ningún lado) que exige que la relación sea de determinada forma y con determinadas prácticas. A mí este tipo de corneador me recuerda a otro tiempo en el que yo estaba metido en el entorno BDSM en el que un amo te cedía  o compartía a su sumisa (o yo cedía o compartía a la mía) en la que le decía cuales eran los limites, que podía hacer y que no y como podía o no hacerlo, y la contrario, si un amo me cedía su sumisa me ponía unos límites y unas normas.
En definitiva, estos “cornudos sumisos” son en realidad dominantes disfrazados de sumisos que ceden a su mujer a otro dominante bien porque ellos no pueden ya realizar aquello que desean y por tanto le encargan a otro el trabajo o bien porque su placer esta en ver a su dominada en las manos de otro dominante.
Veamos que es un cornudo al menos a mi modo de ver, claro, que cada uno le va lo que le va; para mí un corundo es un macho beta, es decir el macho que forma parte de la manada pero que únicamente recibe y cumple ordenes del macho alfa, ¿alguna vez alguien ha visto una manada de lobos donde el macho beta le diga al alfa lo que tiene que hacer y cómo?, ¡pues no!, así de simple.
Dicho esto, es obvio que le macho alfa no tiene libertad absoluta, para eso existen los limites, que se puede y que no se puede hacer, existe el consenso, el corneador define o propone y entre los tres perfilan, pero si tiene que haber un ámbito de acción donde el corneador se debe poder mover sin cortapisas y con libertad absoluta…., por ejemplo, si el corneador desea hacer un gangbang pues es lógico que en un momento dado la pareja opine y acepte o no si eso no está dentro de ese ámbito de acción del corneador, pero lo que no es admisible es que el corneador desee poseer a la hembra como el quiera y se encuentre con que debe hacerlo según desea el cornudo.